Este es el pedazo de excremento más interesante que he visto
Y no lo digo yo, sino Andrew Jones. Eso sí, hace cerca de 20 años. Incluso afirmó que era más valioso que las joyas de la corona. No, no se trataba de una mierda de oro y diamantes. Eso podría haber provocado más de un problema rectal en quien tuviera que soltarla. Aunque tuviera la ventaja de no ensuciar nada, no compensaría con la sangre y vísceras que arrastraría el excremento a su paso.
¿Quién puede defecar algo tan valioso? ¿Cristiano Ronaldo? No. La respuesta: un vikingo. Con sus características y su antigüedad, puedo suponer que se habrá revalorizado. Aunque dudo que Andrew haya probado a venderla (desde luego, si le dice al comprador que le ofrece una mierda no peca de mentiroso).
El objeto en cuestión mide 23 centímetros, fabricado tras una dieta típica mediterránea basada en carne y pan, salpicado con huevos de gusanos intestinales. Supondremos que los All-bran aún no estaban disponibles en la época. Esta valiosa reliquia del pasado ha quedado fosilizada con el paso del tiempo, oculta hasta que en 1872 la encontraron donde iban a construir un Lloyds Bank en York, Inglaterra. Desde entonces se le conoce como el coprolito de Lloyds Bank.
En el 2003, rompieron el coprolito en 3 trozos, aunque un experto en reconstrucciones de heces vikingas los unió de nuevo para el disfrute de generaciones futuras.
¿Quién puede defecar algo tan valioso? ¿Cristiano Ronaldo? No. La respuesta: un vikingo. Con sus características y su antigüedad, puedo suponer que se habrá revalorizado. Aunque dudo que Andrew haya probado a venderla (desde luego, si le dice al comprador que le ofrece una mierda no peca de mentiroso).
El objeto en cuestión mide 23 centímetros, fabricado tras una dieta típica mediterránea basada en carne y pan, salpicado con huevos de gusanos intestinales. Supondremos que los All-bran aún no estaban disponibles en la época. Esta valiosa reliquia del pasado ha quedado fosilizada con el paso del tiempo, oculta hasta que en 1872 la encontraron donde iban a construir un Lloyds Bank en York, Inglaterra. Desde entonces se le conoce como el coprolito de Lloyds Bank.
En el 2003, rompieron el coprolito en 3 trozos, aunque un experto en reconstrucciones de heces vikingas los unió de nuevo para el disfrute de generaciones futuras.
¿Y cómo se sabe que es un excremento? jeje. Yo pensaba que los excrementos se desintegrarían, pero me pregunto bajo qué medio se ha fosilizado.
Imagino que estaba bien extreñido el vikingo.
Pues por la composición. Aunque la forma ayudaría a identificarlo. La cosa es que hay muchos coprolitos humanos en el mundo, incluyo los deshacen para estudiarlos. A veces recuperan hasta el olor.