¿Dónde termina el cuello de una serpiente?

¿Cómo visten las camisetas las serpientes?
Sabemos donde empieza la cola de una serpiente, pero ¿dónde termina su cuello?¿Es todo cuello hasta la cola? Y la duda que ha estado retrasando el avance de la humanidad, ¿cómo se pondría una camiseta? En el caso de las cobras, la diferencia puede ser más evidente, pero en el resto de las serpientes, el límite entre el cuello, el torso y la cola no está tan claro. Incluso sugeriría que carecen de uno de estos segmentos.


Para responder a estas preguntas debemos fijarnos en su esqueleto, principalmente en su columna vertebral (siendo sinceros, tampoco es que tengan muchos más huesos que mirar). Normalmente, una serpiente tiene unas 100 vértebras, aunque pueden llegar a las 400. El número de vértebras y de costillas, ausentes en la cola, depende de la serpiente. Las especies constrictoras tienen más costillas y las excavadoras tienen menos vértebras en relación a su tamaño. Aquellas con más vértebras también suelen ser más lentas.

Su columna vertebral se divide en precaudal o región presacra y caudal o postsacra. Esta viene a ser la diferencia que vimos en la entrada anterior entre el cuerpo y la cola. Como el sacro está ausente en todas las serpientes salvo los leptotiflópidos (Leptotyphlopidae), lo normal es ver simplemente los términos precaudal y caudal. Estas regiones pueden dividirse a su vez de la misma manera que en otros vertebrados: cervical, torácica y lumbar en la región precaudal, y anterocaudal, mediocaudal y posterocaudal en la región caudal.


Las vertebras cervicales, es decir, las vértebras del cuello, suelen ser escasas en las serpientes. Sin embargo, aunque lo parezca, no es sencillo dar una respuesta útil para todas las serpientes. Es de sentido común aceptar que su cuello comienzan con el atlas y el axis, dos vértebras sin costillas que siguen al cráneo. La tercera vértebra también suele incluirse como una vértebra cervical, pero ¿se acaba allí? En caso negativo, ¿qué diferencia a las vértebras cervicales de las torácicas? Incluso el asunto puede complicarse más porque las vértebras cervicales pueden estar presente aunque no exista un cuello definido.

Un rasgo que suele señalarse para diferenciar a las vértebras cervicales de las dorsales son la presencia de hipoapófisis posteriores presentes en las primeras. La hipoapófisis posterior es una extensión ósea en la porción inferior de la cara dorsal del cuerpo vertebral. Se ha sugerido que esta característica evolucionó a través de la extensión cervical. El problema de este punto de referencia es que hay familias donde esta hipoapófisis está presente en todas las vértebras precloacales, es decir, todo los segmentos antes de llegar a la cola. Como alternativa se menciona el uso del músculo cuadrado cervical (cervicoquadratus), considerado homólogo de una parte del músculo cucullaris (nombre antiguo del músculo trapecio por su forma de cogulla de monje), concretamente el músculo episternocleidomastoideo, en los escamosos no ofidios, marcando su posición ancestral en la 11ª vértebra. El tiroides y el pulmón también suelen situarse donde comienzan las vértebras dorsales.

Fuentes

  • Lillywhite, H. B. (2014). How snakes work: structure, function and behavior of the world's snakes. Oxford University Press. 
  • Sood, M. S. (1948, July). The anatomy of the vertebral column in serpentes. In Proceedings of the Indian Academy of Sciences-Section B (Vol. 28, No. 1, pp. 1-26). Springer India.
  • Garberoglio, F. F., Gómez, R. O., Simões, T. R., Caldwell, M. W., & Apesteguía, S. (2019). The evolution of the axial skeleton intercentrum system in snakes revealed by new data from the Cretaceous snakes Dinilysia and Najash. Scientific reports, 9. 
  • M Woltering, J. (2012). From lizard to snake; behind the evolution of an extreme body plan. Current genomics, 13(4), 289-299.
  • Holman, J. A. (2000). Fossil snakes of North America: origin, evolution, distribution, paleoecology. Indiana University Press.
  • Tsuihiji, T., Kearney, M., & Rieppel, O. (2006). First report of a pectoral girdle muscle in snakes, with comments on the snake cervico-dorsal boundary. Copeia, 2006(2), 206-215.
  • Tsuihiji, T., Kearney, M., & Rieppel, O. (2012). Finding the neck–trunk boundary in snakes: Anteroposterior dissociation of myological characteristics in snakes and its implications for their neck and trunk body regionalization. Journal of morphology, 273(9), 992-1009.
    Siguiente entrada Entrada anterior
    No Comment
    Añadir comentario
    comment url

    Libre para donar o aceptar cookies