Los insólitos premios Darwin

Los premios Darwin son unos galardones irónicos que se les entrega a aquellos que dejan este mundo de manera patética (más bien a sus familiares o amigos), sin dejar descendencia, y por lo tanto, sin perpetuar su estupidez.

Los concursantes, que normalmente se presentan solo una vez, deben estar cuerdos y en forma. Además deben sufrir un accidente causado por un descuido extraño o por una extraordinaria idiotez. No hace falta morir, tan solo quedarse estéril o dejar inutilizados sus órganos sexuales. El hecho debe ser cierto, no vale ir contando por ahí que te fuiste al otro barrio al morder una motosierra en marcha, a menos que seas un fantasma.

Ahora vamos con algunos de los premios más originales:

1. En 1995, un hombre murió aplastado por una máquina de Coca Cola, algo normal y que nos ha pasado a todos cuando no tenemos dinero para un refresco. Sin embargo, según los policías, el hombre llevaba 3$ en monedas y 25$ en billetes. Posiblemente si hubiera pagado a alguien para que golpease la máquina de Coca Cola, sería otro quien estaría muerto, las Coca Colas habrían salido y el hubiera podido recuperar su dinero.
2. En San Luis Robert Puelo, de 32 años, estaba causando problemas, por lo que el dependiente le amenazó con llamar a la policía. Robert cogió un perrito caliente y se lo metió en la boca y se fue sin pagar. La policía lo encontró inconsciente delante de la tienda con una Vienesa de 15 centímetros, nada del otro mundo para una actriz porno.
3. Dos universitarios en Houston querían ver como se doblaban las monedas cuando un tren les pasaba por encima. Se alejaron para contemplarlo desde una distancia segura, poniéndose sobre otras vías. En ese momento vino un tren en dirección contraria que les enseñó en sus carnes como se doblan las personas cuando les pasa un tren por encima. Las monedas no sufrieron ningún daño ni físico ni emocional.
4. Un herrero ruso llevaba utilizando 10 años una bala como la de los tanques. Un día le dio con tanto esmero que la bala explotó. Según la autopsia murió por la explosión.
5. Un coleccionista de 29 años muere asfixiado en su habitación por culpa de un equipo de submarinismo roto. Quería repararlo, pero cuando se puso la máscara de buzo se asfixió.
6. Un hombre tuvo la genial idea de hacerse un traje que tuviese un cuchillo clavado. Para ello, se puso una madera para no clavarse el cuchillo (tan tonto no era). Así que a martillazos, empezó a golpear el cuchillo hasta que este atravesó la madera y su pecho. Sin embargo, el traje era de un realismo insuperable.
7. Un golfista decidió hacer 18 hoyos en medio de una tormenta. Sin embargo, en el 8º hoyo sintió que necesitaba descargar sus reservas de orina, por lo que se acercó a un árbol (que más daría hacerlo ahí en medio si con la tormenta no había nadie que mirara). Mientras orinaba tranquilamente, un rayo tocó tierra cerca suyo. La electricidad del rayo se transmitió por su orina hasta destrozar tesoro más preciado. Fue encontrado por el guardián del campo.
   

Los premios Darwin