En el año 2000, todas las mujeres serán amazonas

En diciembre de 1950, los diarios de todo Estados Unidos publicaron un artículo distribuído por Associated Press titulado "Cómo piensan los expertos que viviremos en el año 2000". El artículo fue escrito por varios editores de AP y cubría todo, desde el futuro de las películas al estado de la economía en el año 2000. También contiene predicciones de la editora Dorothy Roe sobre la típica mujer del año 2000. Roe la describe con proporciones perfectas: seis pies de alto (1,8 m) y compitiendo con los hombres en deportes como el fútbol americano y la lucha libre. La mujer prevista por Roe tenía posiciones importantes en el mundo de la política y de los negocios, con la frase final que proclama que podría ser presidenta.

Según predicen antropólogos y expertos en belleza, la mujer del año 2000 será una enorme Diana. Medirá más de seis pies y usará un zapato del tamaño 11 (27 en México, en Europa es 42.), con hombros de luchador y músculos como un camionero.

Lo más probable es que haga un trabajo de hombres, y por eso se vista en función a su trabajo. Su pelo será muy corto, para que no le moleste. Probablemente llevará una ropa más funcional durante el día, usando volantes solo por la noche.

Los pantalones serán su vestimenta en su trabajo diario. Estarán hechos de fibras sintéticas, tratados para mantener el calor en invierno y fresca en el verano, absorbiendo los rayos ultravioletas beneficiosos y evitando las quemaduras. Será una ropa ligera con bolsillos para cápsulas de comida, que comerán en vez de carne y patatas.

Sus proporciones serán perfectas, aunque amazónicas, porque la ciencia habrá perfeccionado la ración de vitaminas, proteínas y minerales que proporcionará la mayor eficiencia corporal y el mínimo de grasa.

Participará en todo tipo de deportes - probablemente competirá con atletas masculinos en fútbol americano, béisbol, boxeo y lucha libre.

Estará en todos los grupos de alto nivel de finanzas, negocios y gobierno.

Incluso podría ser presidenta.

Esta predicción iría en contraposición con las de Nicolas Henrion, quien consideraba que el ser humano era cada vez más pequeño, dejando muy atrás los 38 y 36 metros de altura de Adán y Eva.

Fuente: Blog de Smithsonian magazine