Las plantas imitadoras
Ophrys apifera |
Los muérdagos australianos (Loranthaceae) son hemiparásitos capaces de imitar a su huésped, principalmente a través de sus hojas. Al menos 16 de sus especies imitan a uno o más huéspedes. Son aquellas presentes en la selva las que muestran menos especificidad. En ocasiones, se confunden en la distancia, pudiendo percibirse sus diferencias mediante una inspección más minuciosa. Se sostiene que este mimetismo tiene un componente genético relativamente estable para cada especie, establecido como consecuencia de la selección natural. La presión para usar este recurso pudo ser la suficiente para que ocurriera varias veces de forma independiente en varios tipos de muérdago.
Boquila trifoliolata |
Se considera que esta estrategia les sirve para evitar ser devoradas por los herbívoros, ya que aquellas en el suelo o troncos sin hojas eran consumidas con más frecuencia que las que se mimetizaban. Además, como enredadera, el hecho de situarse en un nivel superior fuera del alcance de la mayoría de herbívoros le supone una defensa adicional.
A diferencia del muérdago australiano, la B. trifoliolata no tiene conexión fisiológica con el huésped. Incluso puede imitarlo sin tener un contacto directo. Por otra parte, el muérdago australiano muestra más especificidad.
Cryptostylis ovata |
Turnera sidoides ssp.pinnatifida |
Por otra parte, la Byttneria aculeata, de la familia de las malváceas, puede mostrar variegación en las hojas para mostrar manchas blancas para simular los mordiscos de larvas, evitando que los herbívoros se alimenten de ellas u otros insectos depositen allí los huevos.
La planta imitadora que, irónicamente, es más conocida es la llamada planta piedra (Lithops), cuyo nombre vulgar denota su apariencia. Son plantas de Namibia y Sudáfrica caracterizadas por el aspecto de sus dos anchas hojas que la asemejan a un par de piedras.
El Elaeocarpus hookerianus Raoul de Nueva Zelanda tiene una peculiaridad, ya que su aspecto cambia completamente tras dejar atrás su juventud. En esta, presenta unas ramas birfurcadas con hojas de formas muy variables de colores de marrón a negro, pareciéndose a ramitas muertas. Sin embargo, al alcanzar los tres metros, el ángulo de sus ramas se cierra y produce hojas más grandes, elípticas y verdes. Esto pudo servir para confundirse con el entorno y pasar desapercibida para los moas (Dinornithidae). Cuando la planta ha alcanzado determinada altura, las hojas comienza a producir proyecciones con formas de espinas que dificulta el consumo a los animales. No obstante, también se ha propuesto que las ramificaciones en su juventud le permitirían a la planta buscar nuevos ambientes de luz tanto horizontal como verticalmente.
Fuentes
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- Ernesto Gianoli, Fernando Carrasco-Urra. Leaf Mimicry in a Climbing Plant Protects against Herbivory. Current Biology. Volume 24, Issue 9, p984–987, 5 May 2014 DOI: http://dx.doi.org/10.1016/j.cub.2014.03.010 Gaskett, A.C. Floral shape mimicry and variation in sexually deceptive orchids with a shared pollinator. Biol. J. Linn. Soc. Lond. 2012; 106: 469–481
- Benitez-Vieyra, S., Hempel de Ibarra, N., Wertlen, A.M., and Cocucci, A.A. How to look like a mallow: evidence of floral mimicry between Turneraceae and Malvaceae. Proc. Biol. Sci. 2007; 274: 2239–2248
- Smith, A.P. Ecology of a leaf color polymorphism in a tropical forest species: habitat segregation and herbivory. Oecologia. 1986; 69: 283–287
- Fadzly, N. and Burns, K.C.Hiding from the ghost of herbivory past: evidence for crypsis in an insular tree species. Int. J. Plant Sci. 2010; 171: 828–833