¿Cuál es el pajarito que lo cuenta todo?

Pájaro con esmóquin y pajarita.

Eres un niño, quieres disfrutar por tu cuenta con actividades inocentes, como practicar torturas inhumanas en una nave en las afueras o negociar secretos nucleares con terroristas, cuando tu madre se entera porque "se lo ha dicho un pajarito". ¿Cuál es la identidad ese pájaro chivato?

El pajarito en español

Usando el Corpus Diacrónico del Español (CORDE), en Sermones de Fray Dionisio Vázquez (1479-1539) ya se menciona a pájaros que transmiten información, aunque no de una manera que pueda reconocérsele una vinculación a la dichosa frase. Durante siglos es más común encontrar la expresión "murió como un pajarito". El "pajarito" no tendría un oído atento a transmitir datos hasta Cuentos del hogar (1883) de Teodoro Baró y Sureda. Desde entonces, es más frecuente que el pajarito cuente confidencias.

Orígenes

Ilustración de Gregorio Magno sentado con la paloma junto a su boca. Un escriba levanta la tela que los separa para mirar. Ilustración en libro de cantos que entregó el papa Adriano I a Carlomagno en el 785.


Como con las vidas del gato, hay varias explicaciones a su origen. Según Juan el Diácono (?-882) en Vita Gregorii, Gregorio Magno (540-604), 64º papa cristiano, cuando le dictaba al escriba sus homilías sobre Ezequiel, se quedaba en silencio durante mucho tiempo. Intrigado, como estaban separados por una tela, el escriba lo ojeó y vio al Espíritu Santo sobrevolando su cabeza. El papa tan solo hablaba cuando la paloma le quitaba el pico de la boca. No obstante, Juan el Diácono también escribió que este papa creó un antifonario y una escuela de canto. El antifonario es un libro litúrgico que recoge las antífonas del año, siendo las antífonas las melodías cortas que conectaban con los versículos de los cantos latinos religiosos. De esta manera, no solo el canto gregoriano sería nombrado en su honor, sino que el pajarito divino era quien lo veía y oía todo.

La paloma morreándose con el papa.

Gregorio Magno vivió varios siglos antes que Juan el Diácono y no hay constancia de que fundara una schola cantorum, aunque pudiera existir en su tiempo, ni que existiera algún sistema de notación musical en su época. Como escribía Isidoro de Sevilla (560-636) en Etimologías, "a menos que los sonidos se conserven en la memoria del hombre, perecen, pues no hay manera de escribirlos". Aunque Gregorio I acortó la letanía, simplificó algunos ritos eclesiásticos y puso orden en la misa, es posible que se confundiera con Gregorio II (669-731), más interesado en la música. El suceso con las pausas puede tener la misma credibilidad. A pesar de ello, fue motivo de múltiples ilustraciones a partir del siglo X.

Por otra parte, incluso en el ámbito cristiano se ha retrocedido más en su formulación, pues en Eclesiastés 10:20 dice "Ni aun en tu pensamiento digas mal del rey, ni en los secretos de tu cámara digas mal del rico; porque las aves del cielo llevarán la voz, y las que tienen alas harán saber la palabra". Una posible relación con los augures romanos, que interpretaban los auspicios mirando a las aves en el cielo, seguiría teniendo relación con el Espíritu Santo, pues su forma de paloma es una adaptación a la cultura grecorromana.

Fuentes

  • Lord, S. (2008). Music in the Middle Ages: a reference guide. Bloomsbury Publishing USA.
  • Taruskin, R. (2006). Music from the Earliest Notations to the Sixteenth Century: The Oxford History of Western Music (Vol. 1). Oxford University Press.
Siguiente entrada Entrada anterior
No Comment
Añadir comentario
comment url

Libre para donar o aceptar cookies