¿Yasuke era un samurái?

Yasuke con armadura de samurái.

A pesar de su lejanía y su posterior aislamiento, en Japón había personas negras, aunque fueran una rara avis que se limitaran mayormente a grupos temporales, especialmente en la costa. Entre cientos de africanos esclavos o con otros oficios que llegaron en barcos europeos, Yasuke no solo abandonó sus tierras, sino también el anonimato adentrándose en Japón y ganándose una posición privilegiada a cargo del daimio Oda Nobunaga.

¿Qué se sabe de Yasuke?

Yasuke, calvo, con armadura negra.

Conocemos a Yasuke (弥助 o 弥介) únicamente por los textos. De hecho, no sabemos cómo se llamaba antes ni, como samurái, si tuvo otros nombres.

Crónicas de Oda Nobunaga

El primer testigo de su presencia es el Shinchō kōki de Ōta Gyūichi, una crónica sobre Oda Nobunaga. En este se cuenta que el 27 de marzo de 1581 (calendario juliano), el padre trajo a un "monje" (rapado) negro  desde los países cristianos, negro como una buey, con unos 26-27 años, fornido y con la fuerza de 10 hombres, para que lo viera Oda Nobunaga. 

En el 23º día del segundo mes, un bōzu [monje] negro vino del país kirishitan [cristiano]. Parecía tener 26 o 27 años. Negro en todo su cuerpo, como un buey, este hombre parecía robusto y tenía buen comportamiento. Es más, su formidable fuerza sobrepasaba a diez hombres. El Bateren [Padre] lo trajo como manera de mostrar sus respetos a Nobunaga. De hecho, era debido al poder y gloria de Nobunaga que los tesoros aún desconocidos de los Tres Países y las curiosidades de este tipo eran vistas aquí una y otra vez, una verdadera bendición.

En la versión del clan Maeda, añade:

Un hombre negro fue tomado como vasallo por Nobunaga-sama y recibió un estipendio. Se decidió que su nombre sería Yasuke. Recibió una espada corta (短刀, tantō) y una casa. A veces se le hacía llevar las herramientas de Nobunaga-sama. 

Carta de Luís Fróis

Jesuita con un noble japonés.

En la carta de Luís Fróis del 14 de abril de 1581, se dice que, el lunes de Pascua, cuando Nobunaga estaba en la capital, se reunió tanta gente a ver al cafre que hubo heridos y casi mueren de las piedras lanzadas. Ni los guardias en la puerta pudieron contenerlos y rompieron la puerta. Dijeron que, si lo enseñaban por dinero, podrían haber ganado rápidamente 8000-10000 cruzados. Como Nobunaga, que estaba en el bloque de al lado, en el templo
Honnō, también quería verlo, lo llevó el padre Organtino. Incrédulo, Nobunaga pidió que lo desnudaran de cintura para arriba para comprobar que su color era genuino, viéndolos también sus hijos y su sobrino, comandante de Osaka, que le dio 10000 monedas. Este encuentro lo relataba también 

El lunes después de Pascua, Nobunaga estaba en la capital, pero un gran número de personas se reunieron frente a nuestra casa para ver al cafre, creando tal conmoción que la gente resultó herida y casi muere a causa de las piedras arrojadas. Aunque había muchos guardias en las puertas, era difícil evitar que la gente los derribara. Todos decían que si lo mostrábamos por dinero, fácilmente ganaríamos entre 8.000 y 10.000 Cruzados en poco tiempo. Nobunaga también quiso verlo y mandó llamarlo, así que lo trajo el padre Organtino. Con gran emoción, no podía creer que aquel fuera el color natural y no obra humana, por lo que le ordenó quitarse toda la ropa por encima de la cintura. Los hijos de Nobunaga también lo llamaron y todos estaban muy felices. El sobrino de Nobunaga, el actual comandante de Ōsaka, también vio esto y se alegró tanto que le regaló 10.000 monedas.

En el capítulo XXVII del libro VI de Histoire ecclésiastique des isles et royaumes du Japon (1627), François Solier, además de indicar que estaban presentes los tres hijos de Nobunaga, señaló que el cafre era nativo del área de Mozambique y llegó a Japón a través de las indias orientales.

Carta de Lorenzo Mesia

En la carta del padre Lorenzo Mesia del 8 de octubre de 1581, repite el interés de Nobunaga por él, quien creía que estaba pintado con tinta. Entonces, el cafre había aprendido un poco de japonés, hablaba regularmente con Nobunaga y le enseñó algunos trucos. Forjaron tan buena relación que Nobunaga se convirtió en su patrón y le otorgó un acompañante para distinguir su posición por la calle, donde decían que lo iba a convertir en noble (殿, tono).

El sacerdote trajo consigo un cafre y nadie en la capital lo había visto antes, todos lo admiraban e innumerables personas vinieron a verlo. El propio Nobunaga lo vio y se sorprendió, pensando que estaba pintado con pintura y no creía que hubiera nacido negro. Lo veía de vez en cuando y sabía algo de japonés, por lo que nunca se cansaba de hablar con él, era fuerte y sabía algunos trucos, por lo que Nobunaga estaba muy feliz. Ahora es su fuerte patrón y, para que todos sepan, ha hecho que alguien lo acompañe por la ciudad. La gente dice que Nobunaga lo convertiría en tono (殿, noble, señor).

Diario de Matsudaira Ietada

Matsudaira Ietada, sentado con armadura y espada.

El diario de Matsudaira Ietada nos cuenta que el 11 de mayo de 1582, un día lluvioso, Nobunaga le dio un estipendio y su nombre, Yasuke, cuyo origen se desconoce, aunque hay varias especulaciones. Lo describió negro como la tinta y con 6 shaku y 2 fun altura. Un pie (
尺, shaku) tenía una longitud variable según la época y la zona, pero rondaba los 30 centímetros. De esta manera, habría superado 1,8 metros de altura.

Decimonoveno [11 de mayo de 1582], día de Teibi. Lloviendo. Su Alteza le dio un estipendio. Dicen que Dios [los jesuitas] lo presentó. Tenía al hombre negro con él. Su cuerpo era tan negro como la tinta, medía 6 shaku 2 fun [1,82 metros] de altura. Se dice que su nombre es Yasuke.

Este incluiría que acompañaría a Oda Nobunaga y Tokugawa Ieyasu durante la batalla de Tenmokuzan en Kōshū (甲州) contra Takeda Katsuyori en marzo de 1582. No obstante, no luchó allí. La razón es que las fuerzas combinadas de estos daimios superaba en 100 veces a las fuerzas de Takeda Katsuyori. Para cuando llegó Nobunaga, no había mucho que hacer.

Informe de Luís Fróis

En su informe a la Sociedad Jesuita el 5 de noviembre de 1582, Luís Fróis asegura que el cafre que entregó el visitador Alessandro Valignano a Nobunaga a petición suya fue a la mansión de su heredero tras su muerte, donde luchó durante mucho tiempo, pero que uno de los vasallos de Akechi se acercó para que entregara su espada y así lo hizo. Cuando este vasallo le preguntó a Akechi qué hacer con él, dijo que es como un animal y que no sabe nada, que no lo matara al no ser japonés y que lo entregara a la iglesia del padre indio.

Y el cafre que el Visitador [Alessandro Valignano] le dio a Nobunaga a petición suya, después de su muerte fue a la mansión de su heredero y luchó allí durante mucho tiempo, pero cuando uno de los vasallos de Akechi se acercó y le pidió que le entregara su espada, él se lo entregó. Los vasallos fueron a preguntarle a Akechi qué hacer con el cafre, él dijo que el cafre es como un animal y no sabe nada, y no es japonés, así que no lo maten y lo entreguen a la iglesia del sacerdote indio. Con eso nos sentimos un poco aliviados.

En este caso, Fróis se refiere a la espada como "cataná".

¿Era un samurái u otra cosa?

Un tanto, una espada corta.

Aunque entre historiadores no hay duda, entre el público se ha generado la opinión de que Yasuke era un personaje insignificante, una mascota exótica de Nobunaga o un simple paje. Esto es difícil de creer, pues un esclavo entre tantos que no haga más que servir a su señor no recibe este número de menciones, incluso más allá de la novedad de su color de piel. Tampoco lo seguirían mencionando 46 años después, expandiendo los detalles, si fuera irrelevante. Para ello, sería necesario ignorar la información posterior a su primer encuentro con Nobunaga.

El nombre y el estipendio (扶持, fúchí) son claves para su consideración como samurái. El término para estipendio se usa para el pago a guerreros para que contraten a sirvientes, normalmente también guerreros, y de forma temporal, aunque no exclusivamente. Por los textos, sabemos que se mantiene al servicio de la familia Oda hasta que su relación termina por motivos de fuerza mayor, por lo que no ocupa una posición temporal. Además, en el Shinchō kōki se usa repetidamente para referirse al pago a otros samuráis, por lo que esta no parece una excepción.

La consideración como paje proviene del término koshō (小姓), que se deduce de la mención de que a veces actuaba como portador de armas (道具持ち, dōgu-mochi). Este es un término usado también en el Shinchō kōki con Mori Ranmaru antes de conseguir un feudo en 1582. El koshō era un rango de samurái menor al bushō (武将), estando formado con frecuencia por los hijos jóvenes de estos y que no entra en conflicto con la consideración como samurái. Si hay dudas ante ello, teniendo en cuenta lo relatado por Lorenzo Mesia, si tuviera una posición de poca importancia, ¿por qué el daimio le asigna un acompañante para distinguirlo por la calle en lugar de ser él quien acompaña a otro para servirle?

Tras la batalla de Tenmokuzan, tenemos en el diario de Matsudaira Ietada un testigo de su posición. Al abandonar Azuchi, Nobunaga cruzó el río Shinano y examinó la cabeza de Katsuyori. Luego se dirigió a Suwa, donde, dos semanas después de la batalla de Tenmokuzan, Nobunaga dejó que los soldados ordinarios (ashigaru) y criados (chūgen y komono) regresaran a sus casas y se quedaran con él los líderes de escuadrón. Este es un periodo tranquilo para Nobunaga, pues en el camino ve el Fuji y a comienzos del mes siguiente ve Kōfu, llegando a Suruga y Tōtōmi a mediados de mes en su camino de vuelta a la capital. En Hamamatsu, el 7 de mayo, Nobunaga ordenó que sus pajes y guardias de caballos se le adelantaran para ir a casa, sea por Honzaka o por Imagire, quedándose con él tan solo los arqueros y arcabuceros. Luego pasó por Yoshida, Kiyosu, Gifu y de vuelta a Azuchi el 13 de mayo de 1582. Aunque la entrada de Matsudaira menciona a Yasuke dos días antes, solo pudo haberlo visto en el banquete de Ubaguchi 3 de mayo. Con todo, demuestra que permaneció con Nobunaga al menos tres semanas después de que este mandara a soldados comunes y criados a sus casas. Esto, tanto por sí solo como en conjunto con el resto de indicios, descartan las malas suposiciones que lo menospreciaban y apoya que fuera un samurái.

El incidente de Honnō-ji.

Por otra parte, Yasuke habría estado entre los 150 hombres que intentaron resistir contra los 13000 de Akechi Mitsuhide en el ataque en el templo Honnō en junio de 1582. Cuando todo estaba perdido, debió huir al templo de Myōkaku-ji con Murai Sadakatsu y sus hijos, donde estaba el heredero Oda Nobutada, y acompañaría a este al palacio de Nijō, donde intentaría combatir el asedio.

Aparte de esto, algunos intentan desestimarlo con mitos comunes de los samuráis, como que la katana era su arma única o principal o que era un cuerpo de élite que requería años de formación para lograr la destreza y el reconocimiento como samurái. De hecho, hubo samuráis coreanos, como Wakita Naokata, Soga Seikan, Rinoie Motohiro y Yagyū Shume; el samurái chino Kawaminami Genbei; el neerlandés Yayōsu; el inglés Miura Anjin y, tras el sakoku, el samurái pruso Hiramatsu Buhei. Estos no necesitaron ser uno con la hoja ni ninguno de los requisitos absurdos que se le piden exclusivamente a Yasuke. Por ejemplo, Miura Anjin era intérprete y armador y se convirtió en hatamoto, un portaestandarte, un cargo exclusivo de samuráis de alto rango con derecho de audiencia con el sogún. Yayōsu era un comerciante y navegante que actuó como consejero diplomático e intérprete para el shogunato Tokugawa. Dado que los extranjeros eran llamados en ocasiones onis, ¿por qué iba a ser descabellado que un daimio contara con un hombre fuerte, de más de 1,8 m y una piel negra nunca vista entre sus filas?

¡Pero Lockey es un mentiroso!


Por último, el mayor disparate es que algunos tomen Yasuke: The true story of the legendary African Samurai (2019) de Thomas Lockley y Geoffrey Girard como si fuera un documento histórico. Lo mismo ocurre con la serie Yasuke (2021) de Netflix o con Assassin's Creed: Shadows. Es ficción histórica que podrá basarse más o menos en hechos históricos conocidos, pero donde necesita un hilo conector que aporta el autor. ¿Se lo inventa? Por supuesto. Si es malo, tendrá anacronismos o incoherencias. Si es bueno, relatará cosas que podrían haber pasado, sin que eso signifique que ocurrió así. Son licencias de autor, pues su objetivo principal es entretener y vender. En cierta manera, es como cuando adaptan un libro o videojuego al cine. Necesitará cambios porque es otro medio y otro público.

Si ves el libro de Lockley y tener los pensamientos de Yasuke no te hace pensar que, quizás, no sea un ensayo o investigación sobre el tema, puedes intentar buscar las referencias. Las referencias son esos pequeños números al final de palabras o frases o nombres con años entre paréntesis que expanden la información en el pie de página o al final del capítulo. Es similar a las obras anotadas, pero citando otras obras donde consultar la información señalada. Si eso no está y no puedes consultar la base de lo que se describe, entonces no estás ante una obra científica. 


Además, aunque parezca mentira tener que aclararlo, si alguno de los fragmentos anteriormente citados aparece en su obra, no fueron ideados por él. Simplemente tomó lo ya escrito, como si un autor escribe sobre Julio César y menciona "Veni, vidi, vici". Si este autor afirma haberse inventado su libro, la razón es que no tiene más remedio, pues es escritor. El único material disponible son unas pocas menciones y el contexto histórico. Con algo tendrá que completar las 480 páginas, aparte de con una fuente bien visible.

Y, más allá de Lockley, esta respuesta negativa hacia Yasuke no es más que la consecuencia de las corrientes políticas esquizofrénicas que ven amenazas contra el status quo en todas partes. Puede que el afrocentrismo distorsione y simplifique la historia para sus propios fines, pero no son los nuevos illuminatis que actúan constantemente desde las sombras.

Fuente adicional

  • Ōta, G. (2011). Book XIV. In The Chronicle of Lord Nobunaga. Brill. pp. 385-386.
Siguiente entrada Entrada anterior
No Comment
Añadir comentario
comment url

Libre para donar o aceptar cookies