Seguramente todos conocéis en mayor o menor medida el famoso ciclo del agua, ya sea por conocimiento del medio o por ciencias naturales. A primera vista, no parece que se pueda decir nada nuevo sobre él. Sin embargo, y para justificar esta entrada, hay algo que normalmente no se ha tenido en cuenta: los microorganismos. Es un aspecto que aún se está estudiando, pero parece ser que los microorganismos pueden influir en las precipitaciones y que, en su ausencia, también se reduzcan la cantidad de lluvia, nieve o granizo.