¿A qué temperatura se congelaría la orina durante la micción?
No es algo que ocurra habitualmente, por lo que no te angusties pensando que te podría pasar a ti. La condición obvia, sobrentendida en el titular, es que, para que pase esto, debe hacer bastante frío. La cuestión es cuánto.
Caspar Green calcula la temperatura dando por hecho algunas cosas. Para empezar, hay que tener en cuenta que la composición de la orina varía ligeramente de una persona a otra, dependiendo de factores como la alimentación o el estado de salud. El 95% de la orina es agua, siendo la urea el segundo componente mayoritario con 9,3 g/l. El cloro (1,87 g/l), sodio (1,17 g/l), la creatinina (0,670 g/l), otros iones y compuestos orgánicos e inorgánicos le siguen en una proporción mucho menor.
La urea y la sal disminuyen la temperatura de congelación del agua. Acudiendo a los estudios ya realizados, tomando la molaridad de 3,389, la temperatura de congelación respecto al agua disminuye 5,594°C. Es decir, la orina se congelaría a -5,6ºC.
La orina partiría con los 37ºC de la temperatura corporal, teniendo que reducirse 42,6ºC. Asumiendo que tarde segundo y medio (siendo generosos) en llegar al suelo, tendría que enfriarse a 28,4ºC/s.
Usando la ley de enfriamiento de Newton:
Donde:
Ya sabemos que t=1,5 segundos, T(t)=-5,6ºC y T0=37ºC. La respuesta a la pregunta se haya en Ts, pero no conocemos la constante k. Esta varía según la masa, la composición química del área de superficie, entre otros factores. Sin este dato, asumiendo que la orina se comporta como el agua. El dato extraído de este experimento muestra que para el agua, la constante era 0,0293 (se desconoce tanto el área de superficie como el volumen). Seguramente estaría en reposo en el laboratorio. En un chorro, tendría más superficie y menos masa, por lo que supondremos que la constante se multiplica por 10, es decir, que el valor es de 0,3.
Con estas suposiciones, realizadas debido a la ausencia de ciertos datos concretos, se puede estimar que la orina se congelaría a los -80ºC. El dato exacto podría variar. Por ejemplo, el tiempo que tarda en llegar al suelo podría ser menor, teniendo que enfriarse más rápido y necesitando de una temperatura exterior aún menor.
En la Tierra, la temperatura natural más baja registrada fue de -89,2ºC en la base soviética de Vostok el 21 de julio de 1983. Artificialmente, se han alcanzado temperaturas menores, pero en ningún caso creo que sea sensato orinar en estas condiciones.
A continuación les dejo con el primer especial navideño de Cazadores de mitos, donde prueban (minuto 22:37) si la orina se congelaría al orinar a -70ºC.
Caspar Green calcula la temperatura dando por hecho algunas cosas. Para empezar, hay que tener en cuenta que la composición de la orina varía ligeramente de una persona a otra, dependiendo de factores como la alimentación o el estado de salud. El 95% de la orina es agua, siendo la urea el segundo componente mayoritario con 9,3 g/l. El cloro (1,87 g/l), sodio (1,17 g/l), la creatinina (0,670 g/l), otros iones y compuestos orgánicos e inorgánicos le siguen en una proporción mucho menor.
La urea y la sal disminuyen la temperatura de congelación del agua. Acudiendo a los estudios ya realizados, tomando la molaridad de 3,389, la temperatura de congelación respecto al agua disminuye 5,594°C. Es decir, la orina se congelaría a -5,6ºC.
La orina partiría con los 37ºC de la temperatura corporal, teniendo que reducirse 42,6ºC. Asumiendo que tarde segundo y medio (siendo generosos) en llegar al suelo, tendría que enfriarse a 28,4ºC/s.
Usando la ley de enfriamiento de Newton:
Donde:
- t es el tiempo en las unidades deseadas (segundos, minutos, horas, etc)
- T(t) es la temperatura del objeto en el momento t
- Ts es la temperatura constante del exterior
- T0 es la temperatura inicial del objeto
- k es una constante de enfriamiento para la sustancia implicada.
Ya sabemos que t=1,5 segundos, T(t)=-5,6ºC y T0=37ºC. La respuesta a la pregunta se haya en Ts, pero no conocemos la constante k. Esta varía según la masa, la composición química del área de superficie, entre otros factores. Sin este dato, asumiendo que la orina se comporta como el agua. El dato extraído de este experimento muestra que para el agua, la constante era 0,0293 (se desconoce tanto el área de superficie como el volumen). Seguramente estaría en reposo en el laboratorio. En un chorro, tendría más superficie y menos masa, por lo que supondremos que la constante se multiplica por 10, es decir, que el valor es de 0,3.
Con estas suposiciones, realizadas debido a la ausencia de ciertos datos concretos, se puede estimar que la orina se congelaría a los -80ºC. El dato exacto podría variar. Por ejemplo, el tiempo que tarda en llegar al suelo podría ser menor, teniendo que enfriarse más rápido y necesitando de una temperatura exterior aún menor.
En la Tierra, la temperatura natural más baja registrada fue de -89,2ºC en la base soviética de Vostok el 21 de julio de 1983. Artificialmente, se han alcanzado temperaturas menores, pero en ningún caso creo que sea sensato orinar en estas condiciones.
A continuación les dejo con el primer especial navideño de Cazadores de mitos, donde prueban (minuto 22:37) si la orina se congelaría al orinar a -70ºC.